Esforzarse por lograr un renacimiento africano mediante la cultura y la historia
El folklore del ?frica Occidental nos habla de Anansi, un simp¨¢tico embaucador con apariencia de ara?a, que se percat¨® de que los humanos estaban tristes porque no hab¨ªa nada que les infundiera esperanza e hiciera su vida m¨¢s alegre. Recordando que el dios del cielo, Nyame, pose¨ªa unos misteriosos objetos m¨¢gicos llamados cuentos, pens¨® que ¨¦stos quiz¨¢s podr¨ªan hacer m¨¢s felices a los humanos.
Fue a ver a Nyame y le dijo que quer¨ªa comprarle sus cuentos, pero ¨¦ste le respondi¨® que s¨®lo los podr¨ªa comprar el que le entregara a cambio de ellos a Onini, la serpiente pit¨®n asesina, a Osebo, el leopardo escurridizo, a Mmoatia, el hada maliciosa, y a Mmoboro, la mort¨ªfera plaga de avispas. A cualquiera le hubiera parecido una empresa imposible hacerse con esos cuatro seres tan inaprensibles, pero no a Anansi, que se las arregl¨® para poder capturarlos a todos recurriendo a sus ingeniosas artima?as. Nyame, el se?or del cielo mostr¨® su desagrado cuando Anansi se los entreg¨®, pero finalmente acept¨® el trato concluido con ¨¦l y cumpli¨® lo prometido.
¡°Ll¨¦vate todos estos relatos a la Tierra para d¨¢rselos a los humanos ¨Cle dijo Nyame¨C y as¨ª te estar¨¢n eternamente agradecidos. Todas estas narraciones magn¨ªficas las llamar¨¢n ¡®los cuentos de la ara?a¡¯ por obra y gracia tuya¡±.
As¨ª fue como Anansi, el embaucador, se convirti¨® en el dios omnisciente que sab¨ªa todas las narraciones. Este mito atestigua la necesidad de crear relatos y compartirlos que tienen todas las sociedades humanas.
Netflix y la UNESCO se han asociado para convocar en todo el ?frica Subsahariana un certamen cinematogr¨¢fico de cortometrajes titulado ¡°Relatos folkl¨®ricos africanos reimaginados¡±. Profesionales de la industria del cine dispensar¨¢n una formaci¨®n t¨¦cnica y asesoramiento especializado a los vencedores del concurso. Adem¨¢s, los galardonados recibir¨¢n en recompensa un presupuesto de producci¨®n de 75.000 d¨®lares para rodar cortometrajes que se estrenar¨¢n en Netflix en 2022, bajo el t¨ªtulo Antolog¨ªa de relatos folkl¨®ricos africanos. Un objetivo esencial de esta iniciativa es descubrir nuevos talentos y dar una notoriedad mundial a los cineastas noveles del ?frica Subsahariana.
De los cuentos de la ara?a a la historia de ?frica
Narraciones como las que Anansi comparte con sus oyentes han sido durante miles de a?os un eje central de la vida del ser humano, ya que constituyen un tipo de juego cognitivo que estimula la mente del ser humano permiti¨¦ndole conocer fen¨®menos naturales y sociales, as¨ª como idear diferentes estrategias para poder desenvolverse en un mundo de por s¨ª complejo. Se puede suponer con fundamento que los relatos portadores de tradiciones y valores comunes respectivos cuanto m¨¢s se acopian y comparten, tanto mejor podemos comprendernos a nosotros mismos, a los dem¨¢s y al mundo que nos rodea. La labor realizada por la UNESCO en los ¨²ltimos decenios para acopiar y transcribir narraciones orales procedentes de todos los pa¨ªses del globo no s¨®lo es un quehacer esencial para proteger y preservar un legado cultural de valor inapreciable, sino tambi¨¦n un intento de acrecentar el conocimiento que tenemos del mundo y de nuestra capacidad colectiva como seres humanos para comprendernos a nosotros mismos.
Los cuentos de la ara?a son comunes a todos los pa¨ªses del ?frica Occidental, pero los que figuran entre los m¨¢s conocidos son los procedentes de Ghana. De hecho, el nombre de Anansi viene de la palabra que designa la ara?a en el idioma akan hablado en este pa¨ªs. Hoy en d¨ªa, este nombre se ha convertido en un s¨ªmbolo de la sabidur¨ªa, creatividad y complejidad de todo el continente africano. Los mensajes, canciones, f¨¢bulas y proverbios de la tradici¨®n oral se han venido transmitiendo de generaci¨®n en generaci¨®n sin recurrir a la escritura, ayudando a la gente a entender el mundo que les rodea y ense?¨¢ndole aspectos esenciales de su cultura.
Al igual que las narraciones de Anansi se fueron transmitiendo oralmente desde tiempos inmemoriales, la historia del continente africano tambi¨¦n se transmiti¨® de generaci¨®n en generaci¨®n. En el ?frica Occidental tambi¨¦n hab¨ªa fuentes hist¨®ricas escritas que databan de varios siglos atr¨¢s, pero la mayor¨ªa de los habitantes del continente no pod¨ªan leerlas. La tradici¨®n oral permiti¨® no obstante que se compartiera una historia com¨²n entre los africanos, ya fuesen del norte del continente o del sur, pese a que los europeos consideraran que ?frica carec¨ªa de historia porque no sab¨ªan ni leerla ni entenderla. Por consiguiente, la historia de ?frica que se dio a conocer al resto del mundo empezaba con la historia del colonialismo y de la dominaci¨®n europea en este continente.
Descolonizaci¨®n de la historia africana
Cuando a principios del decenio de 1960 dio comienzo un periodo de r¨¢pida descolonizaci¨®n en ?frica, los eruditos y los dirigentes de los pa¨ªses reci¨¦n independizados se esforzaron por liberar no s¨®lo sus territorios, sino tambi¨¦n su historia. Para remediar la ignorancia generalizada de la historia del continente, la UNESCO tom¨® en 1964 la iniciativa de publicar una Historia General de ?frica. Para ello convoc¨® a eruditos africanos a fin de que escribieran por primera vez su propia historia del continente recurriendo a fuentes como el folklore, las tradiciones y la cultura, que hasta entonces los historiadores occidentales hab¨ªan ignorado con frecuencia, y adoptando una perspectiva africana exenta de los prejuicios raciales originados por la trata de esclavos y la colonizaci¨®n europea.
Al pretender una renovaci¨®n de los enfoques cient¨ªficos sobre la historia de ?frica, este ambicioso proyecto tuvo repercusiones incalculables en la historia del mundo y ofreci¨® una perspectiva global nueva de la historia de todos los continentes, poniendo a ?frica en el centro de la historia de la humanidad. Fue el primer intento serio de superar los relatos nacionales limitados y de construir una verdadera ¡°historia general¡±, esto es, una historia que destaca los puntos comunes entre los distintos pueblos y las diferentes culturas, que revela las corrientes y los intercambios transfronterizos existentes desde siglos atr¨¢s, y que esclarece la cuesti¨®n de las identidades como nunca se hab¨ªa hecho antes.
La historia m¨¢s antigua del mundo es la del continente africano por haber sido la cuna de los seres humanos. En el siglo XIX Charles Darwin fue el primero que adelant¨® como hip¨®tesis la idea de que el antepasado com¨²n de la especie humana ten¨ªa que ser africano, lo cual alarm¨® a muchos por ese entonces. ¡°La idea de que los humanos ten¨ªamos que haber evolucionado forzosamente y de que esa evoluci¨®n tuvo lugar en ?frica fue un verdadero anatema para muchos, porque no pod¨ªan dar cr¨¦dito a la posibilidad de que fueran originarios del ¡®Continente negro¡¯ los pueblos ¡®purificados¡¯ del hemisferio norte con su piel de color blanco impoluto, sus ojos azules y sus cabellos lisos. Sin embargo, todos los acontecimientos importantes de nuestra historia como seres humanos nos retrotraen siempre a ?frica¡±, dice el paleont¨®logo keniano , uno de los cient¨ªficos que contribuy¨® al proyecto de la Historia General de ?frica desde sus comienzos. ¡°El hombre ¨Cagrega Leakey ¨C es un animal africano, una especie africana que coloniz¨® el mundo en distintas ¨¦pocas y de diferentes maneras. Hoy en d¨ªa, ning¨²n ser humano puede negar que ?frica es su tierra de origen¡±.
La Historia General de ?frica
La Historia General de ?frica es un proyecto precursor que tiene la ambici¨®n sin precedentes de abarcar toda la historia del continente africano, desde la aparici¨®n de los primeros seres humanos en su suelo hasta los retos contempor¨¢neos a los que se enfrentan los africanos y sus di¨¢sporas esparcidas por el mundo. Es una historia que ya no deja en la penumbra el periodo precolonial y que integra profundamente el destino del continente africano en el de la humanidad, poniendo de relieve sus relaciones con los dem¨¢s continentes, as¨ª como la aportaci¨®n de las culturas africanas al progreso general de la sociedad mundial. En estos ¨²ltimos a?os, la UNESCO ha emprendido la preparaci¨®n y redacci¨®n de tres nuevos vol¨²menes (IX, X y XI) de la Historia General.
Bas¨¢ndose en el ejemplo de la Historia General de ?frica, la UNESCO ha publicado luego toda una serie de historias regionales importantes, como . Escritas mucho antes de que surgieran las plataformas en l¨ªnea como Wikipedia, los miles de p¨¢ginas de todos los vol¨²menes que componen esas obras son representativas de una empresa cient¨ªfica sumamente ambiciosa cuyo objeto es construir un entendimiento com¨²n de la historia de nuestra humanidad compartida. La Historia General de ?frica modific¨® la perspectiva global de la manera de escribir la historia y, adem¨¢s, supuso un cambio de escala en la historiograf¨ªa que actualmente siguen explorando la ¡°historia global¡± y las ¡°historias conexas¡±.
Historias Regionales y Generales
La Historia General de ?frica en video
La Historia General de ?frica, cuya elaboraci¨®n inici¨® la UNESCO en 1964, entr¨® en una nueva fase con la filmaci¨®n de una serie documental en nueve episodios realizada por Zeinab Badawi, periodista y productora de la BBC. Esta reportera viaj¨® a los cuatro puntos cardinales de ?frica entrevistando a historiadores, arque¨®logos y ciudadanos, cuyos testimonios y relatos trazan una imagen v¨ªvida del pasado de su continente y de la influencia que ¨¦ste tiene en su vida actual.
Noticias "BBC News" Mundo:
?Por qu¨¦ necesitamos historias? El arte tradicional oral y los valores humanos
Ense?anza de la Historia General de ?frica
En marzo de 2009, UNESCO public¨® el ¡°Uso Pedag¨®gico de la Historia General de ?frica¡±, a fin de satisfacer las peticiones formuladas por los pa¨ªses africanos para adaptar el contenido de los vol¨²menes de la Historia General a la educaci¨®n de los escolares. El contenido pedag¨®gico preparado por la Organizaci¨®n para que se ense?e a los ni?os y j¨®venes de los centros de ense?anza primaria y secundaria de ?frica tiene por objeto mejorar sus conocimientos sobre la evoluci¨®n que han experimentado las sociedades africanas en el plano territorial y a lo largo del tiempo, as¨ª como sobre las repercusiones de dicha evoluci¨®n en el presente y el futuro del continente.
Celebraci¨®n de una cultura com¨²n, de norte a sur y de este a oeste
¡°Umuntu ngumuntu ngabantu¡±, he aqu¨ª una expresi¨®n com¨²n a varias lenguas del sur de ?frica que quiere decir literalmente: ¡°una persona es una persona a trav¨¦s de otras personas¡±.
En la cultura africana el ¡°yo¡± no est¨¢ separado del mundo, sino que est¨¢ unido y fusionado con el entorno natural y social. Aunque haya diferentes etnias y nacionalidades con sus respectivas lenguas, costumbres alimentarias y expresiones art¨ªsticas, todos los africanos comparten una cultura en com¨²n. Esta sabia expresi¨®n africana se hace eco de la c¨¦lebre frase de John Donne ¡°ning¨²n hombre es una isla¡±, record¨¢ndonos que los seres humanos se sienten mal cuando est¨¢n aislados de los dem¨¢s y necesitan formar parte de una comunidad para prosperar.
El final de la colonizaci¨®n a principios del decenio de 1960 no trajo consigo una paz duradera en continente. Todo lo contrario, acontecimientos pol¨ªticos violentos enraizados en conflictos ¨¦tnicos han asolado el ?frica Subsahariana desde la independencia, causando millones de muertes y obstaculizando el desarrollo econ¨®mico.
Para garantizar la paz en todo el continente, las comunidades regionales se han percatado de que necesitan consolidar sus v¨ªnculos e interactuar entre s¨ª celebrando su cultura com¨²n.
Inspir¨¦monos todos juntos en nuestros valores, nuestras tradiciones y nuestra cultura para encontrar el camino de la prosperidad y la paz.
Construcci¨®n de la paz en ?frica
Cada dos a?os la capital de Angola, Luanda, se convierte en un centro mundial para la paz en ?frica cuando acoge el Foro Panafricano para la Cultura de Paz, conocido tambi¨¦n por la denominaci¨®n de Bienal de Luanda. Acuden a participar en este acontecimiento m¨¢s de 60 pa¨ªses representados por delegaciones de gobiernos, organismos internacionales, organizaciones no gubernamentales y artistas que intercambian ideas, crean nuevas alianzas y participan en eventos culturales con un objetivo com¨²n: consolidar la cultura de paz en el continente.
La existencia de esta Bienal es fruto de una labor conjunta llevada a cabo por el gobierno de Angola, la Uni¨®n Africana y la UNESCO, con miras a abordar los diferentes retos en materia de crecimiento y prosperidad que ?frica tiene planteados.
La Bienal tambi¨¦n es una plataforma excelente para hacer el balance de algunas de las iniciativas m¨¢s importantes de la UNESCO en materia de educaci¨®n, ciencia, libertad de prensa e igualdad de g¨¦nero e impulsarlas en toda ?frica. Seg¨²n los datos proporcionados por el Instituto de Estad¨ªstica de la UNESCO (IEU), por lo menos el 50% de todos los j¨®venes del ?frica Subsahariana con edades comprendidas entre los 15 y los 17 a?os estaban desescolarizados antes de que estallara la pandemia de COVID-19, y desde entonces la situaci¨®n no ha hecho sino empeorar. Ese porcentaje de j¨®venes sin escuela es m¨¢s alto que el de cualquier otra regi¨®n del mundo. M¨¢s de la mitad de los j¨®venes que deber¨ªan estar hoy perfeccionando las competencias pr¨¢cticas que necesitan para entrar en el mercado de trabajo, o para proseguir sus estudios y acceder a la ense?anza superior, ni siquiera est¨¢n escolarizados. Como ejemplo de acci¨®n concreta en favor de la educaci¨®n durante la pandemia, cabe se?alar que la Coalici¨®n Mundial para la ·¡»å³Ü³¦²¹³¦¾±¨®²Ô de la UNESCO proporcion¨® un acceso gratuito a Internet a medio mill¨®n de educandos en Senegal, as¨ª como en otros pa¨ªses africanos, para facilitarles de inmediato que pudieran seguir un programa de cursos de ense?anza a distancia, fij¨¢ndose adem¨¢s el objetivo de lograr que luego se matricularan en ese programa unos 3,5 millones de alumnos en total.
The Biennale of Luanda partners forum focuses on how to build innovative partnerships for inclusive democracy and peace across African countries, bringing together international organisations, the financial and private sector, foundations and media as well as civil society, artists and cultural entrepreneurs.
This forum of ideas offers a platform for dialogue on the future of Africa, focusing on solutions to prevent and resolve conflicts using culture, education and free press. It discusses the protection of displaced people and migrants, the contribution of African diasporas and the concerted management of the continent¡¯s natural resources.
The women's forum focuses on how to end all forms of violence against women, and the role of women's networks for peace in Africa. ¡®I believe it is important for us as a continent to come together and have this discussion about the ways we wish to go and how we are going to achieve that,¡¯ said Xoliswa Phenya, Assistant Director for Craft Development at South Africa¡¯s Department for Arts and Culture. ¡®Our leaders have spoken about the African renaissance. Perhaps it¡¯s time the younger generations participate so we can bring this dream into fruition.¡¯
IEU
Instituto de Estad¨ªstica de la UNESCO - educaci¨®n primaria y secundaria
La Coalici¨®n Mundial para la ·¡»å³Ü³¦²¹³¦¾±¨®²Ô
Cuando la historia de ?frica coadyuva al conocimiento de las sociedades contempor¨¢neas
Anansi, la ara?a, se ha convertido en sin¨®nimo de la competencia y la sabidur¨ªa africanas en el uso de la palabra y sus narraciones han subsistido gracias a su transmisi¨®n tradicional por v¨ªa oral. Este tipo de transmisi¨®n ha hecho que sus relatos viajaran lejos por el resto mundo, especialmente a la regi¨®n del Caribe donde se difundieron por boca de los esclavos deportados desde ?frica en la ¨¦poca colonial.
Anansi lleg¨® a convertirse en un s¨ªmbolo de la capacidad de resistencia y de lucha por la supervivencia de los esclavos africanos y sus descendientes en el Nuevo Mundo. En efecto, las picard¨ªas y artima?as de la ara?a les ayudaron a superar los sufrimientos y privaciones del cautiverio, creando en ellos un sentimiento de continuidad con su pasado africano y permiti¨¦ndoles reivindicar su identidad.
En las Am¨¦ricas viven actualmente unos 200 millones de personas que se autoidentifican como afrodescendientes. En otras partes del mundo hay muchos millones de africanos que viven fuera de su continente de origen. Conocer y comprender los v¨ªnculos hist¨®ricos y culturales que les unen a ?frica es una condici¨®n absolutamente necesaria para abordar la problem¨¢tica de la cohesi¨®n social en nuestros d¨ªas, as¨ª como la cuesti¨®n de la pluralidad de modalidades que reviste la pertenencia a una cultura determinada en las sociedades multiculturales contempor¨¢neas. A todos los pa¨ªses con poblaciones compuestas por millones de afrodescendientes, este estado de cosas tambi¨¦n les ofrece una oportunidad para impulsar el di¨¢logo internacional y estrechar lazos con otras sociedades del mundo entero. Los ciudadanos afrodescendientes suelen formar parte de uno de los grupos m¨¢s pobres y marginados de la sociedad ya que s¨®lo disponen de un acceso limitado a la educaci¨®n de calidad, la atenci¨®n m¨¦dica y sanitaria, la vivienda y la seguridad social. El conocimiento y comprensi¨®n del pasado puede ser una de las condiciones necesarias para romper el nefasto legado y el c¨ªrculo vicioso del racismo, la discriminaci¨®n y la exclusi¨®n.
En la ¨¦poca de la trata transatl¨¢ntica de esclavos, unos cuatro millones de africanos cautivos fueron desembarcados en el mayor puerto de entrada de esclavos de todo el continente americano, San Salvador de Bah¨ªa, para trabajar en las plantaciones de az¨²car del Brasil. Los esclavos que consegu¨ªan huir se establec¨ªan en enclaves libres muy apartados, llamados ¡°quilombos¡±, donde sol¨ªan crear comunidades agrarias tradicionales. Hoy en d¨ªa, Sandra de Santos, descendiente de uno de los esclavos asentados hace 250 a?os en el ¡°Quilombo do Dand¨¢¡±, ha tenido que librar una dura lucha por conservar las tierras en las que su familia vivi¨® durante generaciones.
¡°¡Llegaron los tractores para destruir nuestras cosechas ¨Cdice Sandra¨C y as¨ª estall¨® el conflicto. Lo que plant¨¢bamos un d¨ªa, al d¨ªa siguiente lo destrozaban¡±. Tras largos meses de batallas jur¨ªdicas, a Sandra se le autoriz¨® por fin a quedarse en el terreno.
Para prestar apoyo a los descendientes de esclavos africanos y a las personas de cultura afrodescendiente, la UNESCO participa en las actividades realizadas en el marco del (Enero de 2015 ¨C Diciembre de 2024). Este decenio tiene por objeto proteger los derechos de las personas de ascendencia africana, reconocer sus aportaciones y la preservaci¨®n de su rico patrimonio cultural en todo el mundo, avanzar en las pol¨ªticas de inclusi¨®n y justicia social, erradicar el racismo y la intolerancia, promover la defensa de los derechos humanos y crear comunidades m¨¢s pr¨®speras de acuerdo con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.
Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas
La cultura y las artes africanas se propagan por todo el mundo
Eveline Murmann, una muchacha de 19 a?os que vive en la Rep¨²blica Dominicana, es una de las j¨®venes activistas afrodescendientes que batalla sin cesar para que se reconozcan sus or¨ªgenes y se ponga un t¨¦rmino a una discriminaci¨®n banalizada en las conversaciones cotidianas con frases como ¡°el cabello liso es m¨¢s elegante" o ¡°la piel p¨¢lida es m¨¢s bonita¡±. Otros afrodescendientes recurren a expresiones art¨ªsticas ¨Ccanciones, rap, poemas y danzas¨C para difundir sus relatos, tal y como hac¨ªan sus antepasados con los cuentos de Anansi.
¡°Ha llegado el momento ¨Cdice Eveline¨C de poner punto final al racismo estructural impregnado en nuestra sociedad. Ser afrodescendientes implica asumir nuestro legado cultural, amar nuestra cultura y llegar a formar parte de nuestra propia historia. Significa estar orgullosos de nuestra hermosa piel y de nuestro cabello desbordante de libertad. Tambi¨¦n implica reconocer nuestro valor y poner de relieve nuestra contribuci¨®n al desarrollo de las sociedades. ?V¨¦annos! ??igannos! y ?Cuenten con nosotros!¡±.
V¨¦annos, ¨®igannos y cuenten con nosotros:
La celebraci¨®n de la primera etapa quinquenal de las actividades del Decenio Internacional para los Afrodescendientes (2014-2025) consisti¨® en la presentaci¨®n de espect¨¢culos musicales, de un minidocumental producido en Latinoam¨¦rica, de conversaciones con diversos expertos y de relatos estimulantes de j¨®venes afrodescendientes de todas las partes del mundo que expresaron con bailes, poes¨ªas, canciones y raps, u oralmente, sus vivencias, esperanzas e ilusiones.
De hecho, las voces de la di¨¢spora africana y de sus j¨®venes representantes han llegado a resonar con la suficiente fuerza para que se oigan en todo el mundo. Este es el caso de Mohamed Mbugar Sarr, un escritor senegal¨¦s de 31 a?os de edad que en los ¨²ltimos a?os ha sido recompensado con numerosos premios literarios por sus obras sobre temas contempor¨¢neos como el racismo, la discriminaci¨®n y las relaciones de ?frica con Europa. Con su ¨²ltima novela, La memoria m¨¢s secreta de los hombres, ha logrado ser el primer autor del ?frica Subsahariana ¨Cy uno de los m¨¢s j¨®venes de todos los tiempos¨C galardonado con el Premio Goncourt, la recompensa literaria m¨¢s importante de Francia.
Al igual que la historia de ?frica, la literatura de este continente sigue siempre viva. El reconocimiento cada vez mayor de la val¨ªa de sus autores constituye un primer paso importante hacia una redefinici¨®n de las relaciones de ?frica con el resto del mundo. Adem¨¢s, cabe se?alar las numerosas iniciativas pasadas y presentes adoptadas por la UNESCO, como la proclamaci¨®n del o la inscripci¨®n de , cuyo objeto es destacar y reconocer la importancia que tienen los artistas y creadores afrodescendientes y africanos. Al aderezar la m¨²sica tradicional de sus antepasados africanos con florituras e improvisaciones, los artistas afrodescendientes de los EE.UU. han creado nuevos c¨®digos musicales de los que han surgido el ¡°blues¡± de las orillas del delta del Misisip¨ª y el ¡°jazz¡± de la Nueva Orleans. En ?frica, es preciso poner de relieve que los cantantes y bailarines de la rumba congole?a estuvieron en primera fila de todas las luchas libradas para que se cumpliera la aspiraci¨®n del Congo a su independencia.
Atender a ?frica es mejorar nuestro mundo. Reconocer y dar a conocer las m¨²ltiples ramificaciones de la historia de este continente nos ayuda a comprender mejor las sociedades contempor¨¢neas y nos ense?a a vivir juntos. Este es el principio que gu¨ªa el compromiso de la UNESCO con la ¡°Prioridad ?frica¡± de su estrategia, y tambi¨¦n es la raz¨®n para creer que la cultura africana es un acelerador de la comprensi¨®n mutua, la creatividad y la innovaci¨®n que nos ayudan a sacar provecho de un mundo lleno de esperanzas. As¨ª es como la UNESCO est¨¢ cumpliendo la promesa de Anansi y escribiendo el pr¨®ximo cap¨ªtulo del relato de la ara?a.
La UNESCO y sus socios para el desarrollo est¨¢n prestando una atenci¨®n especial a 54 pa¨ªses africanos con la adopci¨®n de una estrategia m¨¢s s¨®lida y mejor enfocada. Gracias a la aprobaci¨®n de la Agenda 2063 de la Uni¨®n Africana y de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, el renacimiento africano se ha puesto en marcha y se est¨¢n sentando las bases de la Comunidad Econ¨®mica Africana.
Patrimonio Cultural y Natural de ?frica
La creencia fundamental de la UNESCO es que la paz duradera y el desarrollo sostenible tienen sus ra¨ªces en las propias capacidades y competencias de los pueblos, as¨ª como en su sentido de la dignidad y sus derechos. De lo que se trata es de sacar partido del nuevo impulso de ?frica fortaleciendo sus recursos, de los que el patrimonio cultural y natural constituye una fuente de intensa creatividad. Es apremiante salvaguardar para las futuras generaciones la riqueza de ese patrimonio en el continente africano. ?frica no est¨¢ suficientemente representada en la porque sus sitios s¨®lo representan un 12% del total de los sitios del mundo inscritos en ella y, adem¨¢s, aproximadamente la mitad de los sitios del continente figuran entre los inscritos en Lista del Patrimonio Mundial en Peligro.
Agenda 2063 ¨C El ?frica que queremos
La es el esquema y plan rector de la Uni¨®n Africana para convertir al continente en potencia mundial del futuro. Es el marco estrat¨¦gico de ?frica para alcanzar su objetivo de desarrollo inclusivo y sostenible, as¨ª como una manifestaci¨®n concreta de la voluntad de todo el continente de avanzar hacia la unidad, la autodeterminaci¨®n, la libertad, el progreso y la prosperidad colectiva que persiguen el panafricanismo y el renacimiento africano.
El Proyecto del Patrimonio Cinematogr¨¢fico Africano (AFHP)
Llevado a cabo por la Fundaci¨®n Cinematogr¨¢fica presidida por Martin Scorsese y la Federaci¨®n Panafricana de Cineastas (FEPACI), tiene por objeto coadyuvar a la localizaci¨®n, restauraci¨®n y preservaci¨®n de pel¨ªculas que hayan sido rodadas en el continente africano. Se propone identificar 50 pel¨ªculas de notable valor hist¨®rico, art¨ªstico y cultural para luego proceder a su restauraci¨®n. La UNESCO tiene proyectado inscribir esas pel¨ªculas en el Registro de la Memoria del Mundo.