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Nuevamente se ha registrado una gran explosión en la ciudad de Alepo, sitio del Patrimonio Mundial, en esta ocasión en el Hotel Carlton Citadel, edificio de comienzos del siglo XX situado en las cercanías de la ciudadela de Alepo y junto a sus zocos.

Esta nueva explosión da testimonio de la intensificación de la violencia, que ha provocado una crisis humanitaria sin precedentes. En la ciudad vieja tienen lugar continuos combates callejeros y bombardeos, que se cobran un elevado número de vidas humanas e incrementan los riesgos graves de ataques selectivos contra la ciudadela y de nuevas destrucciones en la ciudad vieja.

“Estoy profundamente consternada por el recrudecimiento de la violencia en Alepo, su trágico costo en vidas humanas y la destrucción de su valioso patrimonio cultural”, dijo Irina Bokova, Directora General de la UNESCO.

“Reitero mi llamamiento a todas las partes en el conflicto para que pongan fin de inmediato a la destrucción del patrimonio cultural del país y, en particular, de Alepo. El patrimonio no debe tomarse como rehén en el conflicto, y condeno toda utilización de los sitios culturales con fines militares, como blancos o como refugios”, añadió.

“Los daños a los bienes culturales del pueblo sirio son daños al patrimonio cultural de toda la humanidad. Este principio es un elemento central de la Convención de La Haya para la Protección de los Bienes Culturales en caso de Conflicto Armado, cuyo sexagésimo aniversario se cumple este año. Exhorto a todas las partes a que respeten sus obligaciones a este respecto”, terminó diciendo la Directora General.