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Impulso a la agroforestería sostenible en la Reserva de Biosfera Jaragua-Bahoruco-Enriquillo, República Dominicana
Una misión para restaurar y preservar los ecosistemas forestales
El proyecto rehabilita zonas dañadas por incendios forestales y prácticas insostenibles, proporcionando medios de vida alternativos a las poblaciones locales. Combina la restauración ecológica con sistemas agroforestales para equilibrar la conservación medioambiental con las oportunidades económicas.
Es un esfuerzo crucial para la Reserva de Biosfera Jaragua-Bahoruco-Enriquillo, en la República Dominicana, que desempeña un papel clave en la producción de agua y alberga una gran riqueza de especies endémicas. Sin embargo, los ricos ecosistemas de la reserva de biosfera enfrentan crecientes desafíos como incendios forestales, especies invasoras y expansión agrícola.
El proyecto incluye dos parcelas experimentales en las zonas de Aceitillar y Cruce de las Abejas, donde los esfuerzos de reforestación han devuelto vida a paisajes afectados por el fuego. Se han plantado más de 1.000 plantulas de la menos cinco especies autóctonas y endémicas, como la palmera serrana (Prestoea acuminata var. montana), la cigua prieta (Ocotea leucoxilum), el laurel cerezo occidental (Prunus occidentalis), la guasara (Eugenia sp. y Eugenia domingensis) y el guanito de sierra (Coccothrinax scoparia).
El proyecto también aborda la constante amenaza de la hierba melaza o yaraguá (Melinis minutiflora), una especie invasora que asfixia las plantas jóvenes. Un equipo local especializado realiza limpiezas mensuales para proteger los plantones hasta que puedan desarrollarse de manera independiente.
En colaboración con 30 agricultores de comunidades circundantes, el proyecto ha introducido sistemas agroforestales que integran cultivos como café, cítricos y aguacates. Estos sistemas están diseñados para mejorar la productividad de la tierra mientras mantienen el equilibrio ecológico.
Más de 17.000 plantulas han sido distribuidas, y los agricultores han recibido formación para garantizar su éxito. Mediante la diversificación de cultivos y la adopción de prácticas sostenibles, estos esfuerzos buscan reducir la deforestación y, al mismo tiempo, fortalecer las economías locales.
ܳó y compromiso con la comunidad
Un elemento central del proyecto es la participación activa de la población local. Los talleres sobre prevención de incendios forestales y agroecología han formado a más de 70 participantes, entre ellos mujeres y jóvenes, capacitándolos para dirigir iniciativas sostenibles en sus comunidades.
Más allá de la formación, el proyecto ha revitalizado un vivero comunitario, garantizando un suministro constante de plantas autóctonas para futuras actividades de restauración y agroforestería. La colaboración con organizaciones locales y organismos gubernamentales ha reforzado aún más estas iniciativas, sentando las bases para la sostenibilidad a largo plazo.
El proyecto ha tenido un impacto directo en 30 agricultores al apoyar su adopción de sistemas agroforestales, mejorando las prácticas agrícolas sostenibles. Además, los ecosistemas locales se han beneficiado de los esfuerzos de reforestación y del control de las especies invasoras, contribuyendo al restablecimiento de la biodiversidad y el equilibrio ecológico.
El camino por delante
El seguimiento a largo plazo evaluará el crecimiento de las plantas y la recuperación del ecosistema, con planes para ampliar los esfuerzos de restauración a otras zonas degradadas. Continuará el apoyo a los sistemas agroforestales, haciendo hincapié en el acceso al mercado, la diversificación y la posible inclusión de la apicultura para reforzar los medios de subsistencia locales. También se ampliarán las iniciativas educativas, con más talleres previstos para implicar a un público más amplio en la conservación y las prácticas sostenibles. Además, se están estudiando colaboraciones transfronterizas con comunidades haitianas para mejorar los esfuerzos de conservación regionales y fomentar la gestión medioambiental compartida.
Este proyecto subraya el compromiso de la UNESCO de fomentar el desarrollo sostenible uniendo a las personas y la naturaleza y capacitando a las comunidades para que tomen las riendas de su futuro.
El Proyecto ha favorecido acciones para la conservación de los ecosistemas, integrando estrategias como la restauración ecológica, agroforestería, como alternativas sostenibles para las comunidades locales. Fomentando un equilibrio entre la preservación del medio ambiente y el bienestar humano. Las familias beneficiadas han encontrado nuevas oportunidades económicas, disminuyendo la presión sobre los bosques y participando en la protección de su entorno.