Minarete Al-Hadba
Historia del minarete
El minarete de Al-Hadba fue construido en 1172 por el gobernante selyúcida Nur al-Din como parte del complejo religioso que incluía la mezquita de Al-Nouri. Tenía 45 metros de altura y estaba decorado con ladrillos ornamentales.
En el siglo XIV, cuando la estructura comenzó a inclinarse notablemente, se le dio el nombre de "Al-Hadba", que significa "el jorobado" en árabe. El minarete rápidamente se convirtió en un hito prominente de Mosul e Irak, incluso apareció en el billete de 10.000 dinares.
La destrucción de la parte principal del minarete, que se había inclinado sobre la ciudad durante siglos, fue una tragedia nacional. Durante la batalla para liberar Mosul en 2017, los residentes formaron una cadena humana, evitando la destrucción completa del minarete.
Reconstrucción "como era"
La primera fase de la reconstrucción incluyó estudios estructurales, geológicos y arqueológicos a fondo. Los equipos también aseguraron, limpiaron y estabilizaron la base restante del minarete.
Personas moslawíes expertas en ingeniería, arqueología, arquitectura y geología participaron en el desarrollo del proyecto de reconstrucción, y se realizaron consultas con las autoridades locales y las contrapartes.
Tras una encuesta realizada por la UNESCO y la Universidad de Mosul sobre la reconstrucción del minarete de Al-Hadba, el 94% de los encuestados expresó que querían verlo restaurado exactamente como estaba antes de su destrucción en 2017.
La reconstrucción activa comenzó en febrero de 2022. El minarete fue reconstruido completamente con ladrillos, una técnica que no se había utilizado en siglos, y con una estructura inclinada. Las prácticas de ingeniería de vanguardia empleadas garantizan la estabilidad del monumento, al mismo tiempo que aseguran la compatibilidad de los materiales y técnicas de construcción.
3 preguntas a Maria Rita Acetoso
Jefa del equipo de reconstrucción de la UNESCO para la mezquita Al-Nouri, el convento de Al-Saa'a y la iglesia de Al-Tahera
¿Por qué la reconstrucción del minarete es un desafío técnico?
El minarete tenía un eje redondeado de 40 metros de altura, con una escalera helicoidal doble interna y paneles decorativos de ladrillos tallados. Fue construido recto, pero con el paso de los siglos se inclinó. Reconstruir un minarete inclinado utilizando una estructura interna de acero ya habría sido difícil; hacerlo con material tradicional fue aún más desafiante. Y lo hicimos sobre las bases originales, que ya estaban afectadas por graves problemas estructurales antes de la destrucción intencional y quedaron significativamente debilitadas por el gran impacto de la explosión.
¿Cómo hicieron que el minarete se inclinara?
El eje perdido ha sido completamente reconstruido en mampostería de ladrillo, con mejoras locales para reforzar las uniones de las secciones externas del cilindro y el tronco interno. El ángulo aprobado, que significa que la torre se extiende hasta 1.6 metros horizontalmente, se ha alcanzado mediante una colocación especial de las filas de ladrillos, asegurando la horizontalidad de las juntas de mortero, que son críticas para distribuir las tensiones de manera homogénea, evitando así daños estructurales. Hemos movilizado a los mejores expertos internacionales, incluidos los del Campanario de Pisa en Italia.
La UNESCO también quiere usar materiales tradicionales tanto como sea posible, ¿cuáles son esos materiales?
El uso de mampostería de ladrillo ha asegurado la compatibilidad con los materiales originales, el respeto por la técnica de construcción original y la sostenibilidad y durabilidad de los materiales. Esto implicó, tanto como fuera posible, el reaprovechamiento de fragmentos históricos recuperados de la estructura original. Incluyó, por supuesto, los paneles decorativos exteriores, hechos de ladrillos tallados. Al hacer esto, logramos restaurar la verdadera forma del minarete en la cultura de Mosul y en su horizonte urbano.