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UNESCO ratifica su preocupación por respetar la libertad de prensa

UNESCO presentó un informe llamado “Intensificación de los ataques, nuevas defensas” en noviembre del año pasado el cual refleja que el porcentaje de periodistas asesinados fue el más bajo en la última década. Fueron 56 profesionales de los cuales el 61% fallecieron en países en los que no hay un conflicto armado declarado. Asimismo, los datos muestran que la mayoría de autores de los crímenes quedan impunes.
Seis de cada diez casos de homicidio ocurren en países donde no hay guerras civiles ni entre estados. Este dato representa que la vida de los periodistas corre peligro en sus ciudades locales al investigar casos de delincuencia y política local. La UNESCO insta a los países a reforzar sus leyes para proteger la libertad de expresión y sentenciar a los culpables que traten de quebrantarla.
La región que consignó más muertes fue Latinoamérica y el Caribe con 22 periodistas. Le siguen Asia-Pacífico con 15 y el mundo árabe con 10. La razón por la cual el continente americano es el lugar más peligroso para ejercer el periodismo es debido a la lucha contra la corrupción de funcionarios y el narcotráfico que cobra víctimas cada año para ocultar la verdad e investigaciones que desbaratarían una red criminal.
El informe también señala las distintas agresiones que sufren los periodistas, siendo las más comunes las verbales y físicas para silenciar sus opiniones y restringir el acceso del público a la información. Sin embargo, los últimos años han aumentado los secuestros, torturas y encarcelamientos como resultado de su trabajo. En el caso de mujeres, son víctimas de acoso en línea y violencia de género, y con más crueldad que sus colegas masculinos.
La Directora General de la UNESCO, Audrey Azoulay, afirmó que la organización “sigue profundamente preocupada por la hostilidad y la violencia de que son objeto demasiados periodistas en todo el mundo. Esto socava el debate democrático”. La UNESCO sigue con la lucha para mejorar la seguridad de los periodistas y combatir la impunidad de los crímenes contra ellos, es por ello que todos los años se aplica el Plan de Acción de las Naciones Unidas sobre la seguridad de los periodistas y la cuestión de la impunidad.
La UNESCO pide justicia porque “el fin de la vida de un periodista nunca debe ser el fin de la búsqueda de la verdad”.