Sierra de Manantlán
Manantlán, significa “lugar de manantiales” o “lloraderos de agua” en Náhuatl. Se le dio este nombre por ser la principal fuente de abastecimiento de agua de la región, sosteniendo las actividades productivas la riqueza biológica y proporcionando agua en cantidad y calidad, para el uso y consumo de cerca de 500 mil personas en la región. Fue incluida en la Red Mundial de Reservas de la Biosfera de la UNESCO en 1988, por su diversidad de flora y fauna, su geomorfología y los servicios ambientales que proveen a las comunidades.
De Alaska a la Sierra de Manantlán
El colibrí Selasphorus rufus (zumbador canelo) migra de Alaska a los bosques de la Sierra de Manantlán para pasar el invierno, en un viaje de 6.000 km. Durante su estancia se alimentan de las más de 183 especies de orquídeas y 35 especies de salvias.
El ancestro vivo más antiguo del maíz
La conservación de la Sierra de Manantlán se inició a partir del descubrimiento, a finales de la década de 1970, del Zea diploperennis (chapule, milpilla, teocintle), especie endémica identificada como el ancestro vivo más antiguo del maíz. Actualmente considerada como amenazada en la lista de especies en riesgo para México, el Chapule -como le llaman los indígenas que habitan en la reserva de biosfera- se utiliza para fortalecer genéticamente los cultivos de maíz nativo ante enfermedades propias de la planta.
Աپó
En 1984, el gobierno del estado de Jalisco decretó el establecimiento de la Estación Científica Las Joyas. En 1985, se creó el Instituto Manantlán de Ecología y Conservación de la Biodiversidad (IMECBIO), para investigación y educación, ambos pertenecientes a la Universidad de Guadalajara.
Felinos
Alberga a seis especies de felinos que habitan en México: puma (Puma concolor), jaguar (Panthera onca), ocelote (Leopardus pardalis), yaguarundi (Herpailurus yagoaroundi), lince (Linx rufus) y tigrillo (Leopardus wiedii).